6.8.08

carta | obsecion por el compromiso?

Te escribo básicamente porque no te he visto durante ya bastante tiempo, debo admitir que te extraño y que además aunque no lo creas pienso en ti; creo que esto que te diré te puede extrañar, parecer raro de mi, la cosa es que hasta eres el responsable de algunos de mis insomnios, de los que no tengo muchos…
Simplemente creo que además de pensar y tenerte algo de cariño, eres un ser importante y que quizás te quiera más de lo que creo poder…
Te quiero y tu?, me quieres como yo?... aunque no se la respuesta y tenga mis dudas sobre ti, creo que “un cariño de amigo” o un “cariño de hermana menor” no es lo que sientes hacia mi… es claro, amor no lo es, relación de simples amigos no me parece, como tampoco “amigos con cover”. La pregunta es ¿Qué mierda somos?.... podría preguntarte algún día eso, mas sé que a los hombres no les gusta ser presionados ni tampoco estar muy atados o sentirse con “responsabilidades supuestas” que al fin y a miradas de personas ajenas no tendría importancia ni trascendencia alguna.
¿Seremos amantes del viento?, quien sabe, ¿puedo estar segura de algo relacionado contigo?, yo creo que te he dicho la verdad, pero tu a mi si?...
No se el porque de tanta repentina desconfianza hacia ti, debe ser por la distancia, por no conocerte lo necesario, o quizás por la extraña necesidad de toda mujer de ponerle un “nombre” a toda relación; soy mujer, que le voy hacer!, no puedo luchar en contra de la naturaleza femenina, es algo que a todas nos supera y nos afecta…
Y es eso, lo que les atrae a algunos hombres, nuestra inseguridad, nuestra desconfianza, nuestra cobardía, nuestro corazón femenino ilusionado, que confía y cree ciegamente en su hombre, hombre que aunque nos destruya una y otra vez nos sigue encantando y no lo dejaremos hasta que nos guste otro… suena feo lo último, pero es la verdad… demás está decir que “un clavo, saca otro clavo”.
No quiero despedirme sin decirte que te quiero aun con todas las dudas que tengo, aun con todo lo que desconozco de ti, aun con todos los problemas auto-inventados que tienes para no estar conmigo…

No hay comentarios:


¿Un titulo en blanco para mi vida?

Cuando la vida te pide que pares y reflexiones…
Eran las 8:00 de la mañana, como acostumbraba los días sábado, salí a correr. Durante el camino, me sentí algo mareada y decidí descansar un poco… pasaron los minutos, y el malestar persistía; decidí volver a casa.
El lunes fui al doctor, él me dijo que debía hacerme unos exámenes de “rutina”, por las dudas… el mismo día me los hice, me sacaron sangre y me dijeron que al día siguiente tendrían los resultados.
Después del trabajo fui a buscar los exámenes, y los lleve a la consulta.
Al día siguiente recibo un llamado, era mi doctor, me dice que quiere tomarme los exámenes nuevamente, para “confirmar”… después que colgó, me quede preocupada, presentía que algo malo pasaba, pero no sabia muy bien que era…
El doctor me tomo los exámenes, y me cito para el día siguiente…
En el trabajo pedí el día libre, para ir temprano a la consulta.
Espere 5 minutos y me hicieron pasar; al entrar, él solo me entregó un sobre, y me dijo:
- lo que te tengo que decir es algo grave, te costará aceptarlo y es posible que en el sobre que te pasé, encuentres las posibles respuestas a tus preguntas científicas…
- me está preocupando… ¿qué pasa Doctor?
- Francisca… (hizo una pausa, de esas que se sabe que viene algo malo)… eres portadora del virus VIH…
En ese momento, me di cuenta que ya no tenia nada más que hacer ahí, me levante de mi asiento, y salí en dirección a mi auto… No necesitaba concejos ni palabras de Científicos, lo que necesitaba era una palabra de una persona especial…
Me quede varios minutos dentro de mi auto, tratando de razonar cuerdamente… ciertamente todos tendríamos que morir algún día, pero, ¿Por qué de esta forma? Y ¿Por qué a mi?; las típicas preguntas rondaban en mi cabeza…
De un momento a otro, recordé a mis padres, habían muerto en un accidente, cuando tenía apenas 6 años, en ese entonces no comprendía lo que ocurría y no supe apreciar la magnitud de los hechos… ahora que lo pienso, lo único que me queda como recuerdo de ellos, son sus fotos y… mi vida, ¡que ya no la tengo!… ¡que irónico! Me declaran la muerte, justo cuando tengo la misma edad con la que murieron ellos…
Sin saber cómo, llegue al departamento de Martina, mi mejor amiga. Me mantuve parada frente a su puerta mucho tiempo, sin poder hacer nada, me faltaban fuerzas para tocar y hablar, no era fácil, no era un secreto común y corriente, lamentablemente era algo de vida o muerte, literalmente… finalmente toque su puerta, ella sintió de inmediato que me pasaba algo, me conoce de tal forma que, con solo una mirada, lo sabe todo…A pesar de eso, le conté, ella escuchó atentamente, y luego de llorar y lamentarnos juntas, dijo:
- No soy nadie para juzgarte, solo quiero decirte que tienes todo mi apoyo en todo lo que tú quieras, que aunque tengas lo que tengas, seguirás siendo mi mejor amiga y seguiré confiando en ti, como tu confías en mi… tú sabes que no me gustaría que te murieras pero, tú y yo sabemos que todos tenemos que morir de alguna forma, y lamentablemente ésta será tu forma… si tienes el VIH en tu cuerpo es por algo y para algo, las cosas no pasan porque si no más, todo tiene un significado… ¡sólo, te quiero, amiga!
Esa noche fue la más larga y melancólica de mí vida… pero también fue la más hermosa, porque me di cuenta de que las personas que valoro, me corresponden y me dan su apoyo, no importando la situación, ni el lugar…
Pensar, que muchas personas en el mundo se sienten muertas en vida, yo, en cambio me siento cada día más viva… Quizás no pueda decir que “soy feliz teniendo SIDA”, pero si debo reconocer, que me ha servido de mucho…
A mis amigos les regalo una semilla, para que crezca, florezca y de nuevas semillas, para que siempre este con ellos…quizás mi regalo sea para que nunca me olviden, o simplemente para que en la futura flor, recuerden lo libre y feliz que fui en vida. Puede que a algunos se les muera, puede que a otros les crezca una linda flor, solo sé que la plantita simboliza la amistad, quien no sepa cuidarla, se olvidará de mi y moriré en su memoria.